Fueron necesarias 14 horas para salvarlos. Y sin el esfuerzo y los riesgos asumidos por los socorristas suizos, los dos alpinistas vietnamitas probablemente habrían muerto de frío.
La alarma saltó a las 7 de la mañana del lunes, cuando el equipo informó que se encontraban en dificultades en la ruta normal suiza hacia Gran Becca.
Sin embargo, las condiciones meteorológicas en ese momento no permitieron la intervención ni por helicóptero ni por tierra.
Sólo a las 13:00 horas logró salir un equipo del centro de rescate de Zermatt. Subido con los remontes hasta 2.600 metros sobre el nivel del mar, luego continuó a pie, subiendo otros mil metros a través de la nieve, el viento y el hielo.
Los socorristas encontraron a los dos escaladores, fuera de la ruta, sin el equipo adecuado, en particular sin ropa adecuada para esas altitudes, en estado de hipotermia severa. Para llegar hasta ellos fue necesario un descenso con cuerdas dobles. Luego un nuevo ascenso para volver a la ruta normal.
Después de descender al refugio de Hörnli, el helicóptero los recuperó a las 2 de la madrugada. Tras las pruebas médicas, los dos escaladores pudieron regresar a casa.
