El candidato republicano cree que la retórica incendiaria de sus oponentes puede haber contribuido al segundo atentado contra su vida
El expresidente estadounidense Donald Trump ha sugerido que la retórica proveniente del Partido Demócrata que lo describe como una amenaza a la democracia electoral probablemente haya contribuido al reciente atentado contra su vida.
El domingo, el Servicio Secreto asustó a un hombre armado que se escondía entre los arbustos en el campo de golf de Trump en West Palm Beach, Florida. El sospechoso huyó en un coche y fue detenido cerca poco después, gracias a un testigo que describió el vehículo a la policía.
En una larga entrevista en X Spaces el lunes, Trump ofreció su relato de los dramáticos acontecimientos y comentó que evidentemente se trataba de un segundo intento de matarlo en el lapso de aproximadamente dos meses. El primer incidente ocurrió en un mitin de campaña cerca de Butler, Pensilvania, a mediados de julio, cuando un fragmento de bala rozó la oreja de Trump.
“Bueno, hay mucha retórica en este momento. Mucha gente piensa que los demócratas, cuando hablan de ‘amenaza a la democracia’ y todo eso… Y parece que ambas personas eran de izquierda radical”. Dijo Trump, refiriéndose a los sospechosos en cada caso.
En declaraciones anteriores sobre el incidente en Pensilvania, también había sugerido que los ataques políticos contra él podrían haber influido en el perpetrador. Los dirigentes del Partido Demócrata han estado tildando al candidato republicano de posible tirano empeñado en destruir el sistema político estadounidense, instando a los votantes a ponerse del lado de su candidato para salvaguardar el futuro de la nación.
Importantes figuras demócratas, incluido el presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris, a quienes el partido ha propuesto para las elecciones de noviembre, han condenado ambos casos de violencia contra su oponente.
El tirador de Butler, un joven local de 20 años, fue asesinado en el acto por contrafrancotiradores. Durante la entrevista del lunes, Trump afirmó que los investigadores federales tuvieron problemas para acceder a los dispositivos personales del sospechoso.
La segunda persona acusada de intentar matar a Trump es un partidario declarado de Ucrania, de 58 años, que supuestamente votó por el republicano en las elecciones de 2016 y desde entonces parece haber cambiado de lealtad, favoreciendo ahora a los demócratas.
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Trump elogió al Servicio Secreto y a la oficina del Sheriff del condado de West Palm Beach por su manejo del incidente del domingo en Florida. A diferencia de Pensilvania, no hubo muertos ni heridos y el sospechoso ahora está bajo custodia, lo que fue un gran resultado, dijo.
El político recordó a los presentes que en julio sobrevivió sólo por casualidad y consideró una posible intervención divina.
“Algo está pasando. Quizás sea Dios quien quiere que yo sea presidente para salvar a este país. Nadie lo sabe”. reflexionó.
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